Justamente uno de los deseos de llegarnos hasta Barcelona era encontrarnos con la familia, con los primos de Montse. Para ello nos fuimos hasta Rubí, en las cercanías de la ciudad. La alegría del reencuentro, los recuerdos y la búsqueda de llenar los 9 años que hacía no nos veíamos. Los afectos y el cariño compartido marcan el tiempo. Y también, el paso del tiempo. Los grandes somos mas grandes, los chicos se acercan a uno. Y una gran sorpresa, la panzita de Esther que promete mas familia para dentro de poco. Lástima que Maribel, la otra prima, no pudo estar por problemas de salud de Manolo, que por suerte se estaba mejorando.
Otra sorpresa fue para Horacio. El debía realizar el almuerzo. Una barbacoa "a la argentina". Habían conseguido la carne argentina, el carbón y el asador y ahí fuimos.... No recibimos noticias posteriores. Señal de que a todos los cayó muy bien. Por las lecciones dadas, la próxima barbacoa de Jordi será "de la hostia".
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| Ocupar la parrilla como se pueda |
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| La prima Rosa María y Jordi. Marciarmen y Montse |
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| Jordi, con Sonia (hija de Rosa María) y David |
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| Esther (hija de Jordi) e Isaac |
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| Marc (hijo de Paquita) |
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| Rosa María y su hijo Luis |
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| Xavi (el hijo de Jordi) y Maida |
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